Ella 28, él 35. Fueron pareja durante cuatro años, o cinco o seis porque se separan y vuelven, están en el departamento donde vivieron, despidiéndose (de nuevo).
Ella: oye, ya encontré sitio, me mudo.
Él: ah, va… y… ¿dónde es?
Ella: por metro división del norte, la Lupita me va a dar un cuarto
Él: ¿y te puedo ir a visitar?
Ella: ¿Cómo?
Él: para vernos, no sé, pasar alguna noche, coger pues, ya sabes…
Ella: … creo que no
Él: bueno, como sea va a pasar pero si hubieras sido más calmada desde el inicio, por ejemplo, bien sabes que he tenido unas ondas con algunas amigas y tal vez alguno que otro amigo pero te pones bien violenta, a la mejor tú has hecho tus cosas pero ¿alguna vez yo te la hice de pedo? No verdad, y es que ya extraño ser como era antes de ti, aunque pensándolo bien un poco no, por algo me convencí de ser capaz de enamorarme sólo de una persona, de ti. Pero ya se me olvidó cómo se siente y la neta no tengo ganas de sentir eso de nuevo.
Ella: eso siempre me lo haces saber, ya no me lo digas que lloro y no te gusta y la última vez si sentía que ni respirar podía, el aire ya no me entraba sino puro dolor en el pecho porque lo único que intento es que me abraces y beses y me digas que todo estará bien y más bien veo que sólo te desespero y yo queriendo que me quieras y no pasa y me desespero y lloro y no puedo, ni respiro. Como quisiera aunque fuera por lástima un minuto consolarme y…
Él: ¿ves, ves, como siempre te pones? Andas con tus truquitos, trampitas ¿ves?
Ella: oye pero pues creía que bueno si ya tu hablaste de tu sentir y eso pues quería decir que…
Él: ¿eso qué? Hablamos todo el tiempo pero lo que pasa es que tú quieres que te hable de amor y el corazón y pues no quiero eso.
Ella: (llorando)
Él: ay no, mira ya me voy
Ella: (deja de llorar) ya bueno si no quiero atorarme en esto, tengo miedo. Pero el tarot me dijo que el siguiente año entro a la maestría, pensaré en ti todo el día hasta que llegue un nuevo personaje que ojalá use guayaberas como tú pero que por dentro ojalá sea completamente diferente a ti.
Él: ya vas a empezar con tus cosas, que yo no quiero saber eso.
Ella: ¿te dan celos? ¿Arrepentimiento?
Él: hay que pedo contigo, neta, estas loca.
Ella: y todas las veces que te fuiste con tus amigas, como cuando yo te esperaba para que fuéramos a ver lo del aborto y te fuiste con Alondra…
Él: chingados, si ni sabes
Ella: Pues eso, igual y cuando sepa ya te entiendo
Él: eso no soy yo
Ella: Sí sé, ya sabía cómo ibas a responderme de todo esto, todo es bien predecible. Si quisiera hasta un dialogo entre tu y yo podría escribir y va a salir exactamente lo mismo antes de platicarlo.
Él: eso te encantaría, siempre poniendo palabras en mi boca, ándale pues, date, ponte de una vez a hablar por mí, ¿qué vas a poner, que quieres que te diga? ¿Que te quedes? ¿Que te quiero? ¿¡Que me pongo celoso!? Ni al caso. Seguro te acabarías peleando con ese texto también. Tas mal, todo eso sólo hablaría de ti, ¿y yo?
Ella: ¡ESO!, no sé dónde estás tú. Nunca supe cómo estabas con esta relación, no sabía que era lo adecuado para los dos, para ti, si quieres.
Él: vamos a un espejo y cada quien que se mire.
Ella: pues yo quisiera estar en tu lugar.
Él: estas chava.
Ella: nomás te sufro
Él: pues porque quieres
Ella: quererte ha sido vivir en permanente indignación
Él: pues ya, ya termina esto, ya vete
Ella: eso intento
Él: no muy bien
Ella: no sé qué quiero, ¿tú qué quieres? ¿quieres de mi algo?
Él: no
Ella: bueno ya, terminemos entonces bien clarito, no hay que hablar, no quiero ser amigos ni nada.
Él: otra vez con tu clavadez, con tus dramas
Ella: NO QUIERO IRME
Él: pues no te corro, pero no te puedo decir que te quedes.
Ella: no quiero quedarme
Él: VETE YA ENTONCES
Ella: Te amo
Él: odio que digas eso … no puedo hacer más
Ella: no quieres
Él: no me jales ni jalonees a eso
Ella: tú tampoco
Él: ¿yo? ¿a qué?
Ella: ya no me jales a ti, apenas te hago saber que ya ando en otra cosa y me abres un cachito de ti, un cachito de cariño que para mi es un todo, y al final, nada.
Él: puros inventos, yo no te pongo nada.
Ella: me confundes tanto. Yo quisiera que sintieras eso, quisiera ya salir con alguien y que te diera un torzón.
Él: pobre wey, neta, pobre del que le toque.
Ella: ya mejor me muevo
Él: ¿no que te ibas el viernes? Hoy es martes, bueno como quieras, ¿ves cómo eres?
Ella: ¿cómo se te ocurre decirme eso? Chale
Él: como cuando te meto el pie y hago que te tropieces…
Ella: pero me agarras…
Él: siempre…
Ella: eres un idiota…
Él: mensa
Ella: payaso… esto no es amor, ni cariño, ni se parece a nada de eso, pero desearía tanto que lo fuera…
Él: yo también…- silencio - pero no lo deseo tanto…
Ambos: -eco blanco-
Por Claudia Pamela Chavarría
Claudia Pamela Chavarría Machado (pseudónimo Cosmos Pamparius) es antropóloga y estudiante de derecho. Le hace a los derechos humanos y a los cuidados. Originaria de Gómez Palacio, cuenta con críticas, quejas y muchas ganas de escribir en otro lugar que no sean posts de Facebook.
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