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El poema de las lágrimas de Tenebris

"El sueño" es una visión que habita en el reino del inconsciente y todos podemos compartir la experiencia si eres lo suficientemente afortunado. La realidad es más joven que el tiempo mismo, alberga historias y sucesos impresionantes y tétricos. Con el asesinato de Draganor, el cosmos nunca volvió a ser el mismo, la única figura de esperanza que existía, había sido desvivida por un misterioso ente, mismo que fue condenado a un perpetuo castigo. Evento que no solo marcó el comienzo de la edad oscura galáctica, si no el inicio del azote de las tinieblas invasoras. Los hoyos negros empezaron a nacer en los confines de la inmensidad; anomalías inexplicables capaces de destrozar el tiempo y espacio por su naturaleza violenta y lunática. Criaturas amorfas carentes de luz llegaban a través de estos umbrales de la obscuridad, monstruosidades sin forma u lógica, extensos como un sistema solar y abominables como solamente podría imaginarse en la pesadilla más violenta y enferma que el locuaz más trastornado podría soñar, hileras de colmillos podridos y corroídos cubren a las nauseabundas fauces de las bestias, miles de ojos, algunos contaban con un pelaje asqueroso, repleto de sangre y restos podridos de carne, los que en cambio, tenían una piel dura, poseían un exoesqueleto conformado de quitina en descomposición, rígido cual diamante. Las únicas similitudes que poseían era su presencia carente de luz, devoraban el brillo estelar a su alrededor y la capacidad macabra de atormentar la mente de los desafortunados que observarán sus desfiguradas formas, llevándolos a un estado de locura tal, que el suicidio era la opción más racional a todas las posibles resoluciones a sus pesadillas.

El misterio del asesinato del Dios fallecido fue el fuego que prendió muchas leyendas y cuentos en todas partes. El relato popular era el ya mencionado -una deidad desconocida proveniente del abismo del tiempo mató al señor de la luz y la esperanza, con una espada cuyas aristas blancas y un filo tan fino atravesó su pecho y sometió el brillo a su perdición-. Al menos eso es lo que cuentan la mayoría de las razas, influenciado, tal vez, por los omninautas, antiguos seres, avanzado como ningún otro, navegan en sus grandes naves similares a barcos convencionales, en su piel llevan tatuadas estrellas, testamentos de civilizaciones que ya no están entre nosotros, cuyo propósito autoimpuesto fue registrar y preservar la historia de la realidad hasta el final de esta. Sin embargo, una historia siempre tiene más de un punto de vista. La segunda versión usa la misma premisa que la anterior. Este escrito verbal legendario, con cambios, fue contado por los "apóstoles de Tenebris", esta orden misteriosa, conformada por un gran listado de razas y especies, todas ajenas entre sí, alienígenas unos con otros. Algunos eran enormes como montañas, otros poseían cientos de brazos, esqueletos retorcidos o anatomías que desafían la biología terrestre, insectos y artrópodos fisiológicamente anómalos, criaturas que solo se podrían imaginar en los cuentos de ficción más fantásticos, asquerosidades contra la mente de un humano. Esa fue la razón de haber creado el culto por el sacerdote principal, en el cual afirman que el mismísimo Tenebris les hablaba entre llantos, implorando por su libertad.

"Cuando la línea entre tus sueños y la realidad se corte. El pobre rey en la oscuridad gritará con palabras quebradizas un llanto desgarrador de auxilio y piedad. Aquel que fue inculpado injustamente es el mismo que posee la verdad absoluta. Lágrimas caen de la cuenca vacía de su ojo. Sollozando y lamentándose por su condena". Es el testimonio que los miembros de esa secta cuentan al respecto de "El sueño".

Es bien sabido que se reúnen en sus maravillosos y enigmáticos palacios, torres enormes, hechas de unos ladrillos monumentales, con un color grisáceo, que miraban a la nada espacial, vitrales en los marcos, en los que se hallan unas tétricas ilustraciones petrificadas en vidrio, dentro de las siniestras estructuras, existen recámaras del tamaño de pueblos enteros, con pasillos infernalmente extensos como ríos, decorados con antorchas de un fuego rosa, estandartes extravagantes cuelgan en las paredes, escaleras en espiral tan altas que tomaría días llegar desde la planta baja hasta el mirador astral en la cima de la edificación, se encuentran flotando en la exosfera de un planeta al que llaman "N'yarlatlan", característico por el denso desierto azul oscuro que recubre todo el planeta, dunas gigantes del tamaño de las pirámides egipcias de la ciudad perdida de Giza, el sol se muestra cada 10 años terrestres, ya que el cuerpo celeste se encuentra en el final del un sistema solar, cadenas inmensas se alzan de los llanos de la parte norte que desembocan en los cimientos de los castillos para que estos no salgan volando hacia las estrellas.

El sacerdote principal es aún más bizarro que los seguidores, una figura encapuchada, alta, tres metros y medio aproximadamente, con manos que terminan en delgadas y esqueléticas cuchillas mientras que las de sus brazos inferiores tienen una piel similar a la seda con unos 2 grandes dedos índices y dos pulgares en cada mano, no se sabe con certeza si lo que porta como túnica es su piel, grisácea y pálida, o sea una prenda echa del cadáver de algún espécimen desconocido, coronado con una pequeña tiara ceremonial, semejante a la plata, con un brillo llamativo, tal vez porque sus iglesias carecen de algún tipo de luz que no sea la de unos simples palos de madera en llamas. Nadie lo ha visto sin su máscara de tinieblas que cubre lo que se especula que es su rostro, es el más antiguo de todos los integrantes y fundador del culto, su origen es desconocido, aunque existen teorías que es un omninauta rebelde que decidió abandonar su causa luego de tener “El sueño”, otros dicen que es el último de una raza ya extinta que fue consumida en las centrallas de alguna fuerza desconocida, ah esta figura lo rodean miles de misterios inexplicables, sin embargo, la gran tarea de este mesías es localizar a los nuevos adeptos, quienes hayan tenido la visión del antiguo dios, los contactará para luego invitarlos a unirse explicándoles la bendición que habían apreciado en el reino de los sueños, al regresarlos a sus respectivos hogares luego de muchos amaneceres, esparcirán el "poema de las lágrimas de Tenebris", un raro relato narrado en prosa, irónico para ser un poema, que cuenta una extraña historia cuyo significado tan ambiguo hace que quien lo cité sea tomado como un desquiciado a los ojos de su sociedad.

<El gran dragón sobrevuela los planetas. La fractura de la felicidad y la paz reencarna en un colapso. Un rugido de agonía se escuchó en el cosmos. Un alma se dividió en dos cuerpos. Una espada sin empuñadura yace en mi corazón. Mi nombre era Draganor, tu nuevo nombre es Tenebris. La luz y la oscuridad separadas a la fuerza. La noche encadenada en el vacío del horizonte. El cuerpo del sol es profanado por unas manos bélicas. Las bestias acechan cazando almas. Las sombras en tu ventana conocen tu nombre. Las voces en tu cabeza te desgarran por dentro. La maleza ruin emerge de la luna tuerta. Reyes falsos gobiernan a las mentes débiles. Comediantes maníacos habitan en mis pesadillas. Profetas macabros se alzaron prometiendo el paraíso. Las lágrimas de un pobre niño se derraman en la nada implorando la libertad que le fue arrebatada. Mientras la luz de un dios es robada del hogar de sus sueños. Un't podret jorvetr'y en't sipretion't solyosalt en't lar'ts penulmmbral's, confutio, implorrandis pogh thu't libegthagh>. Este pasaje lo puedes encontrar en la "Biblia de obsidiana" libro insignia de los apóstoles, hecho con una piedra cristalina parecida a la obsidiana terrestre escrita con un colmillo de alguna bestia del vacío.

La próxima vez que te dispongas a cerrar tus ojos y dirigirte al país del inconsciente podrías ser el afortunado en tener esta visión religiosa de nuestro rey abatido en abandono. Pero recuerda que no solo Tenebris vive en el vacío de tus sueños.

 

Por Santiago Ramirez Rodriguez

Estudiante de preparatoria, egresado de la media superior Sociedad Cultural Colegio Patria, concluyó exitosamente del curso “escritura creativa, Dragones de tinta” impartido por el escritor Luis Arturo Serna Alarcón, tiene una publicación de un cuento (Susurros oscuros) en Cósmica Fanzine aspirante a Artista gráfico y escritor en formación.

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