Galaxsia

No veo nada, le dije a mi novio observando con su telescopio hacia la izquierda

Tienes que centrarte más al centro, me respondió el. 

Tomo el telescopio y suavemente lo enfoco unos centímetros por encima de los edificios.

Es una noche cálida, sin muchas estrellas, el sonido de los grillos se escucha en el aire. Mo novio me llamo esa tarde para que venga a su casa y desde su terraza mostrarme lo que descubrió la noche anterior.

Miré una vez más y aumentando nada un poco el nivel de visión del lente, hasta notar un conjunto de nubes de gas y estrellas blancas que se unían formando un espiral

¿Era eso? Le pregunte devolviéndole el telescopio para que me confirme lo que acababa de ver

Sí, me respondió. No es alucinante creo que es una galaxia

Me quede mirándolo fijo durante unos segundos, mientras él sonreía poniendo una cara que confirma lo que estaba pensando

¿Cómo otra galaxia? Le respondí, sin todavía creer en lo que estaba pensando. No puede ser, la única galaxia que se ve desde un telescopio del observatorio es Andrómeda 

Quizás sea otra nueva galaxia descubierta, que a lo mejor se ven por alguna aproximación de luz estelar. ¿No es maravilloso Gala? Y pensar que yo la descubrí. Me dijo el

Le sonreí feliz, todo parecía indicar que así fuera, pero todavía no podía dar crédito a esa hipótesis, tan espectacular. Lían es un fanático de la astronomía, capaz de estar con el telescopio durante horas, pero de ahí a pensar en que un joven como él pueda ser capaz de algo así. Todavía no se ha descubierto que Lían fuera un genio. 

Pero de ser así… significaría que acabaste de descubrir una nueva galaxia, es un descubrimiento único. Un logro astronómico impresionante

Le dije asombrándome cada vez un poco más con cada palabra que me hacía entrar en razón de la situación y gran descubrimiento

Lo abrace, sintiéndome feliz por él, y por haberme confiado su logro. Le recomendé que llamara a la galaxia con su propio apellido, como suelen hacer a veces, cuando se descubre algún planeta, cometa, estrella o elemento astronómico. 

Al otro día fui hasta el profesor de astronomía que estaba en la escuela secundaria en donde estudiamos yo y mi novio, le pedí en los pasillos que me dejé contarle algo, el me respondió que estaba muy apurado, pero yo le convencí de que se trataba de algo importante. 

Una vez tuve su atención le conté sobre el descubrimiento de mi novio Liam, al principio él se rio no dando crédito a lo que le dije.

Es imposible, me respondió, ninguna galaxia puede verse con un telescopio común, debieron haberse confundido con una estrella grande.

Es verdad, le dije, fíjese esta noche, vera que podrá verlo a si centra su telescopio bien en el medio. Es una galaxia rara, tiene hileras de estrellas, que forman unas figuras extrañas, como de muchos espirales. Le dije llevando mis dedos hacia las formas que había visto atreves del telescopio

El profesor noto la seguridad que hablaba sobre ese descubrimiento, cambiando su cara de chiste a preocupación y asombro. Creo que estaba pensando en que quizás tenga razón y si eso fuera así, Liam, un simple estudiante del ultimo grado del secundario, habrá sido el precursor de uno de los descubrimientos astronómicos más importantes del siglo.

Al otro día el profesor de biología de la primera hora entro diciendo que tenía un comunicado muy importante que decirle a todo el alumnado. 

Hemos tenido el honor de hacer un descubrimiento valiosísimo para la ciencia astronómica, dijo el profesor con cara de felicidad. 

Me acomodo en mi asiento esperando escuchar el nombre de mi novio quien cursaba en otro curso, ya podría imaginar que luego del recreo lo buscarían para darle las muchas felicitaciones, seguramente los demás estudiantes también lo harían, y los medios de comunicaciones vendrían a la escuela y lo llamarían de los programas y pedirían hacer notas y yo me sentiría muy feliz por él. 

Tenemos el agrado de contar con nuestro brillante maestro de ciencias astrónomas quien descubrió una nueva galaxia, a la que llamo con su propio apellido. 

Mi sonrisa cambio a una cara de decepción y confusión, pero ¿Cómo? eso no es verdad, quien descubrió esa galaxia fue Lían, no él. 

En el recreo solo se habló de la nueva galaxia descubierta mientras que los medios llegaban a la puerta del colegio para entrevistar a el profesor, fui con Lían para encararlo, el estaba tan indignado como yo por esa usurpación, y exigimos hablar con el profesor. 

Pero él estaba demasiado ocupado recibiendo periodistas. Le dijimos que ese descubrimiento era propiedad de Lían y que por lo tanto merecía recibir su apellido, pero él no nos prestó atención. 

Le increpamos diciéndole que ese descubrimiento es de Lían, pero él no nos prestó atención. Los estudiantes y otros profesores tampoco creían lo que nosotros afirmamos y esa tarde nos fuimos de la escuela, camino a nuestras casas, muy indignados por lo ocurrido.  

Lían estaba muy triste por lo ocurrido se le notaba en la cara, el dijo:

Descuida, me dice Lían, tengo medios suficientes como para probar a la nasa que yo soy el verdadero descubridor de esa galaxia y no el. Tengo un video y un dibujo que hice hace unos días de la galaxia cuando todavía no había cambiado su forma

¿Esa galaxia cambia de forma?

El afirmo con la cabeza

Sí, yo la descubrí hace cinco días, cuando apenas se percibía una sombra y había que enfocar el telescopio al centro, ni un centímetro más ni un centímetro menos, aumentando el lente al máximo. Era difícil percibirla desde el principio, fue el trabajo de horas de investigación

Le creí a Lían, pues se lo inteligente y dedicado que es a la investigación estelar, y por otra parte me daba pena y coraje su injusta situación. 

Por más brillante que él sea, es difícil que le crean a un joven estudiante de dieciocho años, por sobre a un profesor secundario y universitario licenciado en astronomía. 

Lo acompañe hasta su casa y de camino a la mia, no dejaba de pensar en lo último que me dijo Lían. 

El percibió esa galaxia cuando apenas podía verse una sombra, pero ahora si la miro con mi telescopio en una noche estrellada podría verla enorme en el centro del cielo ¿Cómo pudo haberse vuelto tan visible en nada más que pocos días?  

Durante el resto del día estuve ansiosa en que se haga de noche para sacar mi telescopio al jardín y enfocarlo en el medio para observar la nueva galaxia. 

Pude encontrarla más rápido que la noche anterior y esto se debía a que, como lo había dado a entender Lían, su tamaño había aumentado.

Su color también era ligeramente diferente, las estrellas se veían más amarillentas, supongo que llegará un momento en el que no seguirá viéndose cada vez más cerca.  Debe ser alguna luz estelar que se está reflejando en la galaxia, por eso pareciera como si estuviera cada vez más cerca de la tierra, aunque la distancia entre la nueva galaxia y la tierra no ha cambiado. 

También me llamo la atención sus formas, tan retorcidas, espiraladas, cientos y cientos de espirales de estrellas, nubes, polvo estilar formando círculos, las estrellas se movían formando espirales, más profundos. Me daba impresión verlo, hasta parecía como si la galaxia tuviera vida propia y por eso formara esas figuras tan raras, aunque eso es imposible.

Aunque la manera de comportarse de esa galaxia comenzaba a resultarme desagradable, empezó a dolerme la cabeza, supongo que debido a las formas tan psicodélicas que estaba observando desde hacía al menos una hora. 

Luego escuche un sonido de succión, como si viniese de esa galaxia, sentí como si esta quisiera absorberme. De pronto me vi a mi misma en el vacío del universo por unos segundos y esa horrible galaxia encima de mí. 

Grité alejándome del telescopio, el cielo estaba bien, volví a mirar y la galaxia estaba como antes, con algunas figuras retorcidas más, pero nada fuera de lo común.

Me tomé una pastilla y me fui a dormir, a la mañana siguiente el dolor de cabeza no era tan fuerte, fui a la escuela dándome cuenta que hoy Lían no había asistido. Me llamo la atención, la rara vez no viene a la escuela. 

Le envié mensajes preguntándole como estaba o si había enviado las pruebas de su descubrimiento a la nasa, pero no me respondió lo que me preocupaba aún más. Asiqué a la salida de la escuela fui corriendo a su casa.

Me recibió su mama y me dijo que Lían está un poco extraño, y que no había salido de su habitación. Cuando entré a su cuarto lo encontré debajo de su cama, tomándose la cabeza con las dos manos, apretando los dientes, su cara parecía cansada y sus gestos daban a entender que estaba en un momento de mucha presión.

¿Qué te pasa? Le pregunte y el me respondió en un susurro:

Nos están espiando

¿Quienes?

Los investigadores de esa galaxia, puedo escucharlos hablar hablando ahora mismos sobre sus planes, ellos son unos espías, espían nuestros movimientos, conversaciones, relaciones, quieren saber todo acerca de nosotros. Quieren vigilarnos, para poder manipularnos. 

Pensé que Lían había enloquecido observar tanto esa galaxia le afecto a su psiquis, más de lo que se podría pensar.  

¿Dices que nos vigilan los extraterrestres?

Intrusos, me respondió levantando solo un poco más la voz, no son extraterrestres son intrusos, todavía puedo escucharlos, hablan demasiado, lo hacen todo el tiempo, maquinan planes, planes en contra de nosotros. 

Dijo apretando sus oídos y golpeándoselos con las palmas. Le pedí que se calmara y le prometí ayudar, pero él estaba más preocupado en que me cuide para no brindarles información personal a esos que el denominaba como intrusos

Me quedé unas horas más con él, tratando de calmarlo, aunque Lían estaba tan nervioso, no me escuchaba. Me fui a mi casa extrañada por la situación, en mi mente había muchas preguntas, Lían estaba bien ayer, indignado porque el profesor le había expropiado la gloria del descubrimiento, furioso y decidido a probar que fue el quien vio primero esa galaxia.

 ¿Cómo pudo ponerse así de un día para el otro? Nunca desde hace dos años que conozco a Lían lo había visto así, tan fuera de sí. 

Esa galaxia tuvo que haber provocado su desequilibrio emocional, creo que no se trata de un cuerpo celeste cualquiera, puede ser que esa galaxia esconda algo maligno.

Estaba regresando a mi casa, todavía estaba a unas cuadras cuando escucho la voz de Lían en mi mente, está gritándole a esos que llama intrusos, que dejen de espiarlo y que se vayan. Se lo escucha totalmente alterado y fuera de sí, tan nervioso como cuando estuve en su casa.

 Hago puños sobre mi cabeza, refregándome, como tratando de quitar esa voz de mi cabeza, no quiero escucharlo en mi cabeza, esto no puede ser, yo me fui de su casa hace unos minutos.

 Otra voz se suma. Es el profesor de ciencias astronómicas, esta elogiando esa galaxia de una manera exagerada, estará viéndola desde algún telescopio capaz de ver cuerpos celestes en el día, debe ser el telescopio de la escuela. 

Esto es todavía peor ¿porque escucho al profesor? Me arrodille sintiéndome más desesperada, apretando los ojos y los dientes, tratando de sacar esas voces de adentro de mi cabeza, otra voz se une, es el de la vecina, y otra y otra. 

En minutos pude ser capaz de escuchar a todo el barrio, las voces estaban en mi cabeza y eran tantas que se escuchaban como un murmullo, constante. Como cuando vas a un salón lleno de gente y todos se ponen a hablar a la vez. 

Me voy a mi casa corriendo tapándome los odios con las manos, cuando llego hasta mi casa descubro que hay unos telescopios profesionales y muy caros empapelados. Recién comprados, alguien se dio el lujo de comprar cosas tan costosas como esas. 

Llame a mi familia preguntándoles porque compraron esos telescopios si a ellos no les interesa la astronomía, mi mama, mi papa y mi hermano me reciben con una sonrisa, cuando les pido explicaciones, me dicen muy satisfechos que se van a poner a observar esa galaxia

¿Por qué? Les pregunto.

En la televisión dicen que hay que observar esa galaxia, me responde mi hermano sacando uno de los telescopios al jardín. 

Prendo el televisor y me pongo a ver todos los programas, en cada uno está un conductor pidiéndole a la audiencia que observen la galaxia nueva, hasta los programas infantiles y de animales fueron ocupadas con este tipo de anuncios. 

¡Quieren espirarlos ¡les grito, pero ellos no me prestan atención y se van al jardín a observar las estrellas con esos costosísimos telescopios. 

Las voces en mi cabeza me impedían seguir insistiendo con ellos en que dejen de hacer lo que están haciendo, obligándome a meterme en mi pieza con una almohada en las orejas, apretando los dientes, debajo de la cama. 

Cuando se hizo de noche pude llegar a acostumbrarme al dolor de cabeza y el murmullo contante en mi cabeza. 

Me animé a salir al jardín y con mi telescopio común me puse a observar esa galaxia una vez más. 

Había crecido desde la noche anterior y sus formas también habían cambiado, a unas formas aún más psicodélicas, los espirales terminaban en una punta como de garra, la cantidad de ellos había aumentado significativamente. Toda esa galaxia era pura espirales. Se veía demasiado extraña, no parecía para nada una galaxia normal.  

¿Será que de veras es una galaxia? ¿no será otra cosa? Un elemento espacial que la ciencia no llego a conocer y nosotros no podemos entender y que vino a la tierra para usarnos, aprovecharse de nosotros o quizás hasta experimentar con nuestros cuerpos y mentes.

Esa noche no pude dormirme si no como hasta tres horas después de acostarme en la cama, me daba vueltas de un lado para el otro tratando de acallar las voces en mi mente, que no se iban me atormentaban. 

La ventana de mi habitación se abrió de par en par y un viento frio que hacia volar las cortinas se metió en mi pieza. 

Me levanté pues la ventisca había volado mi frazada y al mirar entre la ventana me pareció ver la galaxia, pestañe un poco más y no estaba en el cielo estrellado. 

Me acerque hasta la ventana y les grité con furia:

¡Déjenos en paz, ¿qué es lo que quieren de nosotros? No voy a permitir que me vigilen hasta cuando duermo ¡

Metí las sábanas y una almohada debajo de la cama. Sentía como si algo o alguien me estuviera vigilando constantemente, incluso debajo de la cama no podía sentirme segura, encima las voces en mi mente tampoco se callaban. 

Es la galaxia maldita, algo están buscando de nosotros y no es nada bueno. 

Tuve que levantarme para ir a la escuela no habiendo podido dormir ni tres horas, estaba muy cansada. 

Solo tome un café de camino a la escuela y cuando por fin levante la cabeza para mirar al cielo, me horrorice de visualizar el monstruo que había en el firmamento. 

Un dibujo de cientos y miles de espirales en el cielo sin nubes, más redondeles de los que se pueden contar, amarillos ubicados de manera prolija y perfecta, en muchas hileras, se retorcían hasta el infinito. 

Esa cosa, no se veía más cercana a la tierra producto de la luz reflejada de alguna estrella. Estaba viniendo verdaderamente sobre nosotros y no era una galaxia más bien, parecía ser algo muy peligroso, una amenaza muy grande que se avecinaba sobre el hombre, puede que cuando esa cosa llegue a la tierra cosas apocalípticas nos sucedan.

Me puse a gritar y a sacudir a mis compañeros diciéndoles a los profesores del peligro inmenso que estábamos a punto de vivir cuando esa cosa llegué a la tierra.

 Pero los profesores y alumnos estaban como adormecidos. En las aulas se dio una única consigna observar la galaxia maravillosa, los alumnos hacían fila para turnarse en los pocos telescopios con los que contaba la institución para observar, otros lo hacían a simple vista, otros dibujaban la galaxia en hojas y otros hasta le escribían poemas. 

¡Están todos locos, les grite, esa cosa nos va a destruir debemos protegernos de la amenaza que se viene ¡

Por más que grite y les advierta, no escuchaban. Ellos estaban como en una especie de hipnosis, los estudiantes, profesores y la gente había dejado de ser la misma. 

Después de ver en lo que se habían convertido mis compañeros y profesores me fui corriendo hasta mi casa. Las calles estaban más vacías que de costumbre, pero, aunque caminara y corría no lograba llegar a ninguna parte. 

No podía ubicar la dirección de mi propia casa, siempre regresaba por otra calle diferente, es como si el barrio se hubiera convertido en un laberinto en donde caminas y terminas apareciendo en un sitio diferente.

 Entonces me acorde de Lían, él es el único que me advirtió sobre los peligros de esa cosa, creo que es tan inteligente que lo supo desde el principio. Aunque durante el corto tiempo en que estuve en su casa solo dijo que nos estaban espiando, algo que el denomino como unos intrusos. 

Quise buscar su casa, pero seguía sucediéndome lo mismo, entraba en una calle y salía por otra, es como si una maldición hubiera descendido en el barrio. 

Se hizo la tarde noche y yo todavía me encontraba en la calle.

Entonces sucedió que durante la noche las voces en mi mente comenzaron a cambiar y de repente empecé a escuchar cómo se producían múltiples asesinatos, la gente enloquecía y salía a la calle a masacres, tiroteos, asfixias, hasta suicidios.

Me apreté los oídos gritando que no, hasta que entre medio de esas voces pude distinguir la voz del profesor de ciencias astrónomas. 

 Quería asesinar a Lían porque era el verdadero descubridor de esa cosa que llamaban galaxia. Podía verlo en mi mente, el había tomado un cuchillo de cocina y salido a la calle, se dirigía a la casa de Lían, estaba yendo por el camino correcto e iba a llegar en unos minutos para matarlo.

Grite queriendo advertirle a Lían del peligro que estaba corriendo mientras trataba de correr hacia su casa, pero él no se daba cuenta, seguía escondido debajo de su cama.  Podía escuchar sus murmullos en mi mente

No llegaba a su casa por más que corría, hasta que el laberinto se abrió y pude divisar la casa de Lían en la esquina.

 El profesor estaba muy cerca y no podía permitir que asesinara a mi novio. Estaba acercándose solo le faltaba unos pasos para llegar, tenía el cuchillo en la mano, estaba decidido y su imagen asesina se mezclaba en mi cabeza con la secuencia de otros asesinatos que también estaban sucediendo en estos momentos. 

Golpeé la puerta de la casa de Lían desesperada, pero nadie me atendía, corrí buscando la reja de su jardín para treparme por ella y así meterme a su casa, cuando una mano me jala hacia atrás. 

Es el profesor de ciencias astrónomas y no se veía nada bien, tenía ojeras violáceas, estaba pálido, despeinado, olía a sudor y su ropa estaba desprolija y sucia. Sostenía el cuchillo sobre mí, en ese momento solo pude gritar pidiendo piedad

Te voy a matar por meterte en mi camino, fueron sus últimas palabras antes de descender el cuchillo sobre mi

Pero en ese momento una luz incandescente lleno el lugar, impidiéndonos la vista por unos segundos.

 Cuando alcé mi cabeza al cielo, vi cientos y millones de elementos esféricos formando espirales, cientos de millones enroscándose hasta el infinito, el cielo estaba repleto de estos, no tenían fin. Todo era una imagen psicodélica, pero no creo que sean palmetas, podíamos ver esas formas muy bien desde esa distancia, no sé qué eran, pero estaba lleno de seres, no podría describirlos, eran unos seres tan diferentes, tenían un traje y miraban hacia nosotros. 

En ese momento el profesor se paró y extendiendo los brazos al cielo grito:

Preciosos, maravillas de la naturaleza, tómenme a mí, llévenme a mí. Yo quiero ser su servidor 

Entonces una luz amarilla e incandescente se posó sobre él. Sobre él y otras personas, que también estaban felices de ser absorbidas por esos.

El profesor se iba elevando al cielo feliz, al igual que otros cientos de personas, hasta que llegaron a ese lugar.

Entonces la felicidad se terminó y pude escuchar sus gritos desgarradores. 

Esos seres se pusieron a descuartizar vivas a esas personas. No pude soportarlo y vomité allí mismo. 

Lían había salido a la puerta de su casa y yo corría hacia él. Nos metimos adentro a esperar que toda esta pesadilla pasara. 

A la mañana siguiente las voces desaparecieron. Al igual que esa extraña cosa que se veía en el cielo.

Lían me dijo que también podía escuchar a la gente al igual que el resto, solo que no lo decían porque habían sido hipnotizados por las fuerzas de esos intrusos. Lo habían hecho para poder espirarlos mejor, me explicaba el con mucha rabia. 

Llame a mi casa, mi familia estaba bien, aunque no recordaban nada de lo que había pasado. Al igual que la familia de Lían. 

Esa mañana prendí el noticiero y lo que dijo el periodista fue lo siguiente: 

La extraña galaxia que se había descubierto hace nada más que una semana, desapareció, los investigadores informaron que ya no existe ni rastro de ella. Para la nasa se trata de un fenómeno de extrañas características astrológicas. También se han reportado en la noche de ayer, quinientas muertes violentas y doscientos suicidas, todas esas muertes de causas desconocidas, también se han reportado diez mil desaparecidos. Se estará investigando la razón de estos extraños sucesos

El reportero seguía hablando, pero yo solo apague la televisión y agradecí que al menos mis seres queridos y yo logramos salvarnos de esta. 

Corri a la casa de Lian el estaba en la puerta y nso abrazamos.

Al dia siguiente la figura en el cielo habia desaparecido.

Prendimos el televisor y en las noticias decía que la galaxsia habia desaparecido, se informo sobre las nuevas muertes sunque nadie sabia quienes las habían provocado y  que se había avistado sobre la desaparición de personas ayer a la noche. 

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Por Cynthia Micaela Maldonado

Escribí bajo el seudónimo de Alexa Wells en Amazon he publicado muchas de mis obras y en otras plataformas de publicación independiente. También colaboré como escritora en una página de YouTube escribiendo cuentos de terror