Los suburbios de la parte más pobre de la ciudad nuevamente fueron víctimas de la creciente ola de violencia por parte de los grupos criminales que buscan hacerse con el control de la región.
Todo parecía una tarde ordinaria, cuando empezaron a escucharse disparos cerca de una escuela, los testigos relatan que todo comenzó como un posible ajuste de cuentas con un vendedor de drogas, sin embargo el suceso escaló rápidamente pues llegaron dos camionetas llenas de presuntos criminales armados de rifles y metralletas de alto calibre y abrieron fuego contra los miembros de otro grupo criminal.
Las familias presentes tomaron a sus hijos y se resguardaron dentro de las instalaciones escolares para mantenerse a salvo, sin poder imaginar lo que ocurriría. Los vecinos narran que solo una patrulla apareció y fue recibida con descargas de rifle AR-15 asesinando a los policías en su interior de manera inmediata.
Las detonaciones de las armas siguieron por veinte minutos más, cuando los criminales entraron a la escuela y tomaron a todos, tanto niños como adultos, como rehenes.
A pesar de la llegada de más elementos de policía e incluso miembros de fuerzas especiales, la situación parecía incapaz de ser solucionada de manera pacífica y se temía por la cantidad de víctimas inocentes que morirían.
Los negociadores eran incapaces de llegar a un acuerdo y la opción violenta parecía ser la única solución, un grupo de policías fuertemente armados con rifles FX-05 descendieron de un camión blindado y comenzaron a prepararse verificando cargadores y cartuchos, así como comunicaciones y la ropa especial que portarían para evitar cualquier baja innecesaria.
Fue en ese momento que algo milagroso ocurrió.
Yo misma estuve presente en aquella aterradora escena, preparando mi mente para lo peor al momento en que una voz femenina nos dijo de manera tranquila y también con autoridad que esperáramos, que no hiciéramos nada. Mire para todos lados para saber quién había emitido el mensaje, pero al ver los rostros llenos de sorpresa de los policías que se preparaban para entrar en acción, me di cuenta que nunca se me ocurrió mirar hacia arriba.
Cuando reaccione y levante la mirada la misteriosa figura ya no estaba ahí, todo mundo se mantuvo quieto por un instante hasta que se empezaron a escuchar detonaciones dentro de la escuela, temimos lo peor y mientras muchos de los reporteros y civiles que nos encontrábamos presentes buscamos refugio en el suelo, un equipo especial vestidos con armadura ropa especial de kevlar y cascos a prueba de balas avanzaba hacia la puerta del instituto. Sin embargo antes de poder entrar uno de los criminales fue arrojado desde el interior de la escuela con tal fuerza que atravesó la puerta metálica y cayo a unos metros de donde me encontraba.
El hombre estaba golpeado, su mano derecha nunca volvería a empuñar un arma, sin embargo seguía vivo aunque incapaz de moverse. Todos miramos hacia la escuela y la vimos saliendo en compañía de niños abrazándola y familias enteras llorando… pero a salvo.
No sabía que creer, no fue su extraño atuendo cyan, su cabellera rosa, ni siquiera el hecho de flotar en el aire a unos centímetros de suelo; fue el tierno cariño con el que cargaba en sus brazos a una pequeña niña lo que causo que me percatara de que estaba atestiguando algo único. Se movió hacia una ambulancia y con extrema precaución puso a la niña en manos de los paramédicos.
“Físicamente se encuentra bien, pero ella padece asma, necesita un respirador de manera urgente” Dijo con tranquilidad y tambien a la vez con firmeza. Era como estar dentro de una película o una historia de ficción. Ante mí una verdadera superheroína acababa de salvar vidas en una situación real.
Los policías armados no sabían que hacer y le apuntaron con sus armas exigiéndole que se tirara al piso. Todos esperábamos alguna reacción violenta de su parte pero solo se limitó a sonreír, se alejó de la ambulancia mientras todas las armas la seguían, inclinó un poco su rostro y de sus ojos parecían emitir un brillo rosa, muy parecido al color de su larga cabellera, sin embargo solo se limitó a decir: “Adentro están los perpetuadores de esta situación, todos están en condiciones de ser juzgados aunque ninguno de ellos jamás volverá a sostener un arma, espero únicamente puedan hacer lo correcto” y tras finalizar esas palabras la misteriosa figura en un entallado uniforme Cyan con Purpura partió hacia los cielos volando a gran velocidad. Por un instante pareció detenerse y hacer un gesto con su mano, mire hacia abajo y vi a los niños imitar ese gesto, se estaban despidiendo.
Para el momento en el que levante el rostro ella se había marchado.
Cuando investigue más tarde pude saber con exactitud lo que había ocurrido dentro de la escuela. Con su gran velocidad desarmó a los criminales que estaban más cerca de los niños, algunos pocos fueron afortunados y se rindieron, aun cuando la mayoría buscaba derramar sangre y uno de ellos sacó una navaja e intento clavársela, si bien la misteriosa heroína le quebró los huesos de la mano como si fueran de papel, no le hizo más daño. Era obvio que se estaba conteniendo y gracias a eso ninguno de los delincuentes murió… aunque se lo merecieran los malditos.
Al final ningún niño salió herido y muchas familias pudieron reunirse de nuevo con sus seres amados gracias a esta inexplicable heroína. Las preguntas rondan en el aire ¿Quién es ella? ¿Por qué hizo eso? ¿En un mundo cínico y cruel porque intentar ser una heroína? ¿Hay más como ella? ¿Cómo nos afectara esto a corto y largo plazo?
Para esta reportera eso es todo, sin embargo espero con impaciencia las futuras noticias que traerá consigo y el amanecer de un mundo que nunca volverá a ser el mismo.
Por Maya Cárdenas para Noticias Internacionales Exclusivas.
Por Ynad Bond
Nació en México, un apasionado de las historias de ciencia ficción, acción y aventura. Es autor de las novelas “El sendero del Tigre”, “La isla de Adys” y “Criaturas de un mundo muerto”.
Actualmente se encuentra trabajando en la saga de historias interactivas de “Blue Justice”
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