Así como tú separas tus narices de mis nalgas luego de asfixiarte suavemente entre las nubes de algodón
Los venados bebés y toda su inocencia encubren toda la mierda que se siente cuando ya no estás
Los videos cortos con caídas inesperadas de recién casados me distraen cuando intento escribirte
Qué difícil ser feminista y estar enamorada de un cuadripléjico mental
Que jamás se moverá del cuadrado "virtuoso" en el que fue incorporado como un peluche minúsculo de las máquinas de monedas que nunca dejan que alguien gane nada
Qué terrible ilación la que twitter me muestra
No son los hilos de los pervertidos Illuminatis o del Opus Dei
Son los hilos de la historia de amor de Justin Bieber con su esposa y la mezcla de rabia que le hicieron ganar millones de dólares a Selena Gómez por su canción de “ardida”
Como mi vagina después de hacernos el amor con tanto odio
Ahora me arde por una cuestión genérica que todas las féminas pasamos en algún momento cuando las hormonas se desequilibran
Espero que deje de arderme la vulva y que tú salgas un día de esa caja, que dejes de ser un peluche y te conviertas en la palanca en manos del individuo que gana.
Composta
I
Yo quería que lo nuestro sea eterno
Sabes, como un puto Volkswagen amarillo
Pero el destino prefirió congelarnos
Entre 1982 y 1996
Yo preferí pegarte una cachetada estando tan excitada
Y tú, ahondar en mis heridas putrefactas
Porque todo lo orgánico es tan saludable
Menos esta horrible composta que has hecho con mis corazones y mis 20 sonrisas orgasmeadas y meadas por ti
II
Estancadas están las aguas de Babilonia
Donde tú y yo nos bañamos
En las fuentes de oro que gobernaban las serpientes
Ahora te extraño
No hay quién me acompañe a grabar mi video porno con el tigrecito blanco
Se quedaron sus líneas negras marcadas en
La espalda de un camión que transportaba enfermos de lupus como cerdos
Muchos cerdos que fluían y eran veganos
III
In love in love
Las lombrices se comen mi cerebro
Y van borrando todos los dedos que me señalaban
El camino inmensurable de las palabras
Los letreros de este no es un paradero
Y todos los bocados de esperanza que me dabas de comer
Finalmente creo que las casas cuadradas si hacen juego con las nubes grises
Y que ya tenemos lista la esencia que fertilizará ambas raíces de nuestra inexorable y lastimera incongruencia
Quizá en algún mundo subalterno
Nuestros ojos se queden juntos
y seamos el cíclope de Rayuela
Husmeando el uno en el otro
las arrugas más finitas de la vida
y de nuestra infancia mezquina
Ese mundo subalterno
es el paraíso de los señores gordos que bailan con ropa interior diminuta
libres como un siu mai recién hervido a punto de entrar a mi boca
boca que adorabas verla tragar
blancas tus emociones
arroz hecho en tu olla a presión
Pero en este mundo ya no me quedo esperando tu mensaje
porque entiendo que te bloquee y es imposible que llegue
mejor nos imagino abrazados cual koalas que no se convirtieron en cloaca
rodeados de delfines rosados en la costa verde
Hermano mío
no hagas más el ridículo
Me comeré un min pao en tu nombre mientras camino por las calles del Centro de Lima
buscando tu aroma tan distinguible entre la orina de los jirones sucios
hasta que un semáforo me advierta:
“Regresa a este mundo”, te veré bajar del taxi
gritarás mi nombre
te lanzaré la mirada
la recibirás como a una pelota de tenis
me sonreirás con los ojos de huevo reventado
y yo no haré nada más que llorar.
Por Carol Angeles
(Lima, Perú, 1996)
Comunicadora social y gestora cultural. Publicó “Hábitos de caza” (FCE, 2020), “Palabras y trazos” (FCE, 2021) y Selección Poética (Libre e Independiente, 2021). Publicó en Liberoamerica, Triada Primate y Grima.
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